domingo, 11 de junio de 2017

VENGANZA O JUSTICIA EN HAMLET

Todos hemos escuchado alguna vez hablar de la conocidísima obra de William Shakespeare, Hamlet. Pero, ¿alguna vez te has parado a pensar cuáles fueron los factores que llevaron al gran genio de las letras inglesas a escribir esta obra?
Hay distintas especulaciones, ya que al ser una obra de tal relevancia se ha estudiado todo lo que la rodea al detalle. 

Algunos estudiosos aseguran que la fuente de inspiración de Shakespeare se encuentra en una leyenda escandinava del siglo XII. En esta leyenda, conocida como La historia dánica, el danés Saxo Grammaticus nos narra las hazañas de un príncipe danés, con el nombre de Amleth. Se piensa que la figura de este príncipe es la que insipiró a Shakespeare el personaje de Hamlet.
La historia de este príncipe danés fue versionada en 1582 por el escritor francés François de Belleforest. Su versión fue titulada como Histoires tragiques. Se piensa que está versión fue la que conoció Shakespeare, ya que gracias a ella Shakespeare pudo conocer esta antigua leyenda nórdica.

Otra versión fue la dada por el dramaturgo inglés, Thomas Kyd, en 1589. Este escribió la obra Ur-Hamlet, que tiene el mismo argumento que podemos observar en la obra se Shakespeare. No se sabe con certeza si Shakespeare solo se inspiró en ella o si Ur-Hamlet es la obra que Shakespeare solo versionó.

A pesar de toda esta incertidumbre respecto a sus antecedentes lo que sí se sabe con certeza es que la obra escrita por William Shakespeare es inigualable en cuanto a la descripción angustiosa de la duda y decisión del protagonista.

Hamlet, el protagonista, es el hijo del difunto rey de Dinamarca, matado por su propio hermano. En el momento de la historia Hamlet se encuentra en un reino reinado por su tío, el cual está casado con su madre, pero la verdadera trama de la película empieza cuando el espectro de su padre le desvela la verdadera causa de su muerte. Esta revelación hará sentir a Hamlet con la necesidad de vengar la muerte de su padre.

Una de las principales características de Hamlet es la contradicción en la que vive, una contradicción causada principalmente por su forma de ser, ya que es muy pensativo y reflexivo, como consecuencia todas sus acciones tienen un soliloquio donde expresa sus sentimientos hacia la acción y cómo cree que debe actuar. La contradicción en la que vive el protagonista es el debate entre si debe matar a su tío o no, ya que él tiene un claro deseo de matarlo, pero por otra parte se encuentra dubitativo respecto a la verdad de la muerte de su padre. 

Este debate tiene su clímax en el famoso monólogo: ser o no ser, esa es la cuestión. En este monólogo Hamlet incluso llega a plantearse la muerte, ya que dice que sería la mejor forma de acabar con el rompecabezas que le está tocando vivir.

Otra característica de Hamlet es la locura. Al principio la fingida locura es una clara estrategia para poder alargar la toma de su importante decisión, pero al final del libro esta locura parece que deja de ser fingida y que toda la situación que le toca vivir a derivado en que se ha vuelto loco de verdad.

Hamlet es un personaje que con todas sus reflexiones y pensamientos nos hace reflexionar sobre la brevedad de la vida, ya que al fin y al cabo la vida es muy corta y la muerte infinita, por lo tanto tenemos que vivirla al máximo y no desperdiciarla, aunque hay veces que la vida nos pone unos obstáculos en el camino que nos llevan a querer abandonar todo, e incluso la vida misma. Hamlet es sin duda el espejo de la existencia del ser humano, ya que el ser humano siempre se debate entre el bien o el mal, pero lo que sin duda hace especial a Hamlet es que nunca se quedará anticuado, ya que a pesar de que hayan pasado años y años desde su creación todavía, a día de hoy, sigue reflejando los problemas del ser humano.

BIBLIOGRAFÍA



No hay comentarios:

Publicar un comentario