miércoles, 7 de junio de 2017

 VENGANZA O JUSTICIA EN HAMLET

    Los antecedentes de la obra literaria de Shakespeare, Hamlet, hay que buscarlos en deferentes obras o versiones. El origen de esta se cree encontrar en la historia dánica llamada "Vitha Amlethi" del danés Saxo Gramaticus (1150-1220), un historiador medieval de cuya vida se conoce muy poco y al que se le atribuye la autoría de los dieciséis libros de la historia danesa de su época, la "Gesta Danorumm", ya que es la leyenda que más parecidos tiene con la versión de Shakespeare. Pero es más probable que este leyese una traducción del último tercio del siglo XVI de François de Belleforest sobre la historia de Saxo, incluida en la "Histoires tragiques" de este autor francés, el cual además de traducir la historia de Saxo, la embelleció substancialmente duplicando su longitud e introduciendo la melancolía del protagonista.
    Pero hay otras teorías que dicen que la fuente principal de Shakespeare para escribir Hamlet podría haber sido una obra conocida como Ur-Hamlet, actualmente perdida, la cual se cree que fue escrita por Thomas Kyd, interpretada por primera vez en el 1589 y la primera versión de la leyenda en incorporar un fantasma.
    Actualmente, aún no se ha aclarado si Sahkespeare tomó esos elementos directamente de la versión de Belleforest o edl Ur-Hamlet y los estudiosos todavía no se han puesto de acuerdo sobre el número de elementos que este podría haber cogido de cada fuente para llegar a su versión de Hamlet, conocida universalmente como definitiva.

    El protagonista de esta obra, el príncipe Hamlet de Dinamarca, es un personaje muy completo y peculiar, es reflexivo, astuto, crítico, noble y apasionado, con unos pensamientos filosóficos y morales muy característicos y completos.

    Este desde el principio de la obra tiene ya una actitud crítica y pensativa sobre lo que tiene que vivir y ver (como la prematura boda de su madre con su tío después de la muerte de su padre o los pensamientos de tristeza y amargura que esta muerte provoca en él). Además, podemos ver en Hamlet un personaje dual, ya que está en una constante lucha interna por la acción y la duda, por su melancolía y su ironía.
    La característica más importante de Hamlet es ese constante estado de duda en el que vive, esa constante contradicción que le impulsa, por una parte, a querer vengarse de su tío, pero por otra, a reflexionar detenidamente, lo que le impide realizar su acción de represalia.
    Él está convencido de que tiene que matar a su tío (venganza), debido a que tiene los suficientes argumentos para hacerlo y es una tarea que le encargó el espíritu de su propio padre, pero aún así, Hamlet se abstiene de tomar y realizar cualquier acción por sus propias manos hasta no estar totalmente convencido y seguro de qué quiere lograr y de si con su acción realmente haría justicia por la muerte de su padre; por eso se dice que esta obra es, toda ella, un dilema entre venganza o justicia.
    Este dilema le lleva a pasar por sentimientos de amargura y soledad e incluso a pensar en un propio suicidio. Pero finalmente, termina imponiéndose al odio y deseo de venganza.


No hay comentarios:

Publicar un comentario